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Cuándo no deberías caminar después de una lesión

“Simplemente camina”. Todos hemos escuchado esto antes, o tal vez incluso te lo hayas dicho a ti mismo, después de una caída o una lesión. Tal vez te torciste un tobillo mientras corrías o tu hijo tropezó y se torció una rodilla durante un juego. Tal vez saltaste para agarrar algo de un estante y caíste de forma extraña.

Hay muchas razones por las que la gente decide dejar pasar el dolor. El orgullo o la vergüenza pueden hacer que dudes en admitir que estás herido. Puede que te preocupes por los gastos médicos o te sientas demasiado ocupado para bajar el ritmo. Pero ignorar el dolor puede llevarte a más problemas.

“Las lesiones son inevitables durante los deportes y en la vida, y muchas personas asumen que sus lesiones son menores”, dijo Elizabeth Batterton , DOCTOR, especialista en medicina deportiva ortopédica de Banner – University Medicine. “Algunas lesiones son menores y se curan solas, pero todas las lesiones deben tratarse como graves al principio para evitar daños a largo plazo”.

El dolor es la forma que tiene el cuerpo de decirte que algo no está bien. Ya sea un pequeño accidente en casa o una lesión deportiva, saber cuándo consultar a un doctor o a un especialista en atención médica puede ayudar a prevenir problemas a largo plazo.

Continúe leyendo para obtener más información sobre los riesgos de ignorar el dolor y qué hacer en lugar de caminar para aliviarlo.

Los riesgos de ignorar el dolor

El dolor no es algo que se pueda ignorar. Es el sistema de alarma incorporado en el cuerpo. “Ignorar esa señal puede causar más daño al cuerpo, especialmente si la lesión afecta huesos, músculos, tendones o ligamentos”, dijo el Dr. Batterton.

Si intentas aguantar, esto es lo que podría pasar:

  • Empeoramiento de las lesiones: Las lesiones menores a veces pueden enmascarar problemas más graves. Lo que parece una simple lesión deportiva, como un esguince, en realidad podría ser un ligamento desgarrado o incluso un hueso roto. Lo mismo ocurre con las lesiones ortopédicas causadas por caídas o accidentes en el hogar.
  • Lesiones compensatorias: cuando una parte del cuerpo se lesiona, otras partes pueden intentar reemplazarla, lo que puede causar nuevas lesiones. Por ejemplo, si cojea debido a un esguince de tobillo, la otra pierna, la cadera o la espalda pueden trabajar en exceso, lo que provoca más tensión o lesiones.
  • Curación más lenta: cuanto más se demore en tratar una lesión, más tiempo tardará en sanar. Ignorar una lesión significa que puede llevar más tiempo recuperarse.
  • Dolor crónico: seguir adelante tras una lesión puede provocar dolor crónico. Cuando las lesiones no se curan correctamente, pueden provocar dolor crónico, debilidad o artritis en la articulación afectada.
  • Impacto en la salud mental: el dolor no tratado puede afectar el estado de ánimo y el bienestar. El dolor crónico está vinculado a la depresión, la ansiedad y una menor calidad de vida.

Lesiones comunes que no debes ignorar

Es fácil ignorar un dolor leve como parte del juego, pero algunas lesiones pueden requerir una visita al médico, a un centro de centro de urgencias o a un servicio de urgencias. Estas son algunas de las lesiones más comunes que nunca debes ignorar:

1. Esguinces y distensiones

Las distensiones son lesiones en un músculo o tendón. Los esguinces se producen cuando se estira o se desgarra un ligamento, el tejido que conecta los huesos. Estas lesiones pueden ocurrir en muchas situaciones, como al practicar deportes, al levantar objetos pesados ​​o incluso al tropezar.

Síntomas: Hinchazón, hematomas, dolor y dificultad para mover el área afectada.
A dónde acudir: Comience con su proveedor de atención médica o con un centro de urgencias. Los esguinces y las distensiones leves suelen curarse con reposo, pero un dolor intenso o una limitación del movimiento pueden indicar un desgarro grave.

2. Fracturas por estrés

Una fractura por estrés es una pequeña grieta o rotura minúscula en el hueso que se produce por un esfuerzo repetido o un uso excesivo. Es común en corredores, atletas y personas que realizan actividades repetitivas de alto impacto.

Síntomas: Dolor que empeora con la actividad, sensibilidad, hinchazón y, a veces, hematomas.
A dónde acudir: Comience con su proveedor o centro de urgencias.

3. Fracturas (huesos rotos)

Una fractura es una rotura más grave que suele producirse a causa de una lesión o un traumatismo repentinos, como una caída o un accidente. Los huesos rotos pueden confundirse con esguinces o hematomas. Cuando te fracturas un hueso, tu cuerpo necesita tiempo y cuidados adecuados para sanar.

Síntomas: Dolor intenso, hinchazón, hematomas e incapacidad para mover la zona lesionada. A veces, es posible que escuche un crujido o vea un hueso que sobresale de su lugar.
A dónde acudir: Centro de urgencias o sala de emergencias, según la gravedad de la lesión. Un hueso roto requiere diagnóstico por imágenes, tratamiento adecuado y, a veces, un yeso o una cirugía.

4. Dislocación

Una dislocación ocurre cuando un hueso se desplaza de su posición normal en una articulación. Suele ocurrir en el hombro , el codo o los dedos, pero puede ocurrir en cualquier parte.

Síntomas: Dolor intenso, deformidad visible, hinchazón e incapacidad para mover la articulación.
A dónde acudir: Visite el servicio de urgencias. Las articulaciones dislocadas deben volver a colocarse en su lugar de forma segura para evitar daños a largo plazo.

5. Desgarros de tendones y ligamentos

Estas lesiones ocurren cuando los tendones o ligamentos se estiran demasiado o se desgarran, generalmente en la rodilla, el tobillo o el hombro. Pueden incluir una lesión del ligamento cruzado anterior (LCA) o un desgarro del ligamento colateral medial (MCL).

Síntomas: Dolor, hinchazón, rango de movimiento limitado y problemas para utilizar el área lesionada.
A dónde acudir: Comience con su proveedor de atención médica o con un centro de urgencias. Los desgarros pueden empeorar sin tratamiento.

6. Conmociones cerebrales

Una conmoción cerebral es un tipo de lesión cerebro causada por un golpe en la cabeza. Es más grave de lo que parece y puede tener efectos duraderos si no se trata de inmediato.

Síntomas: Dolores de cabeza, mareos, confusión, náuseas y, a veces, problemas de memoria.
A dónde ir: Diríjase al servicio de urgencias. Las conmociones cerebrales son lesiones cerebro y requieren atención inmediata para evitar daños mayores.

¿Qué hacer en lugar de caminar para que se vaya?

En lugar de soportar el dolor, es importante escuchar a tu cuerpo y ocuparte de la lesión. A continuación, se indican los pasos inmediatos que puedes seguir con el método RICE:

  1. Descanso: Dale tiempo a tu cuerpo para recuperarse. No apoyes peso sobre la zona lesionada ni realices actividades físicas que puedan empeorar la lesión.
  2. Hielo: utilice una compresa de hielo para reducir la hinchazón y calmar el dolor. Envuélvala en un paño para evitar la congelación y aplíquela durante 15 a 20 minutos cada vez.
  3. Compresión: Para ayudar a controlar la hinchazón, use una venda o envoltura elástica, pero asegúrese de que no esté demasiado apretada.
  4. Elevación: Mantenga el área lesionada elevada por encima del nivel del corazón para reducir la hinchazón.

Para alivio el dolor, tome un medicamento antiinflamatorio de venta libre, como el ibuprofeno. “Si estas medidas no controlan el dolor, es una señal de que debe consultar a un médico”, dijo el Dr. Batterton.

Cuándo buscar atención de emergencia

Algunas lesiones pueden ser tratadas por su proveedor de atención médica o en un centro de urgencias , pero otras requieren atención de emergencia. Visite el servicio de urgencias si presenta alguno de los siguientes síntomas:

  • Dolor intenso que no desaparece con reposo ni analgésicos.
  • Deformidad visible , como un hueso que sobresale o una articulación que parece fuera de lugar.
  • Entumecimiento u hormigueo en el área lesionada, especialmente si no puede moverla.
  • Sangrado abundante que no se detiene después de aplicar presión.
  • Lesión en la cabeza con confusión, vómitos, mareos o pérdida del conocimiento.
  • Dificultad para respirar o dolor en el pecho , lo que podría ser un signo de problemas cardíacos o una lesión grave.

No esperes a que el dolor empeore para hacerte un examen. Si no estás seguro de la gravedad de la lesión, siempre es mejor que la revise un médico.

Llevar

Ignorar el dolor puede parecer una buena idea en este momento, pero puede empeorar la lesión. Es importante escuchar a su cuerpo y buscar ayuda cuando la necesite. Ya sea que tenga un esguince, una fractura o una conmoción cerebral, el tratamiento temprano puede ayudarlo a sanar más rápido y evitar problemas en el futuro.

Consulte a su proveedor de atención médica o a un especialista de Banner Health si alguna vez tiene dudas acerca de su lesión.

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