El proceso para embarazarse parecería bastante sencillo para muchas parejas que desean tener hijos. Haz lo de debes hacer durante tus días fértiles, y ¡voila! concebirás un bebé (varios artículos en inglés y español). Desafortunadamente, no es así de sencillo. A pesar de lo que te dijeron en tu clase de educación sexual cuando estabas en la escuela, embarazarse y no perder el embarazo puede ser una lucha y provocar una infinidad de emociones.
Para la pareja formada por Jenny y Bryan, la decisión de tener hijos comenzó como sucede para muchas otras. Pero luego de dos años sin lograrlo, se hicieron pruebas de fertilidad para enterarse de que había “motivos desconocidos” detrás de su incapacidad para concebir. Atravesaron por seis intentos de inseminación intrauterina (IUI, por sus siglas en inglés), que se tradujeron a una montaña rusa de emociones descritas por Jenny como agotadoras y que lo consumían todo durante ese año. Tras no alcanzar el éxito, Jenny y Bryan llegaron a la difícil determinación de ya no intentar otras opciones de tratamiento.
“A pesar de que habíamos hablado de qué tan lejos queríamos llegar y las opciones que estábamos dispuestos a considerar, seguía habiendo una inmensa sensación de pérdida”, recordó Jenny. “La pérdida de un futuro que nos habíamos imaginado, llevar a nuestros hijos a Disneylandia y verlos crecer. Y ahora, nada de eso iba a ocurrir. Afortunadamente, tenemos un matrimonio fuerte y tuvimos una red de apoyo que nos sostuvo durante este proceso de duelo”, dijo.
La cruda realidad de la infertilidad y la pérdida de un embarazo
Desafortunadamente, las parejas como Jenny y Bryan no son la excepción.
“De todos los embarazos, entre 15 a 25% terminan en un aborto espontáneo, en muchos casos, durante las primeras 12 semanas”, dijo la doctora Pooja Shah, una ginecobstetra (OBGYN, por su abreviatura en inglés) de Banner Health Center (en inglés) de Chandler, Arizona. “Y del 10 al 15% de las parejas no logra embarazarse dentro del primer año de intentarlo”, especificó.
La infertilidad y la pérdida de un embarazo puede ser desconcertante, desoladora, producir aislamiento e incluso provocar vergüenza. Es un trayecto difícil, pero no tiene por qué hacerse en solitario.
En ocasiones, puede ser confuso saber cómo reaccionar, bridar apoyo y estar a su lado para quienes conocen a alguien o a una pareja atravesando por las penas de la infertilidad.
Cómo apoyar a una amiga o a un ser querido
En tanto que no hay un manual de cómo apoyar a una amistad o a un ser querido que está sufriendo a consecuencia de la infertilidad o la pérdida de un embarazo, sí hay algunos lineamientos que pueden ayudar. Jenny, la doctora Shah y el doctor Srinivas Dannaram, un psiquiatra del centro médico Banner Thunderbird Medical Center (en inglés) en Glendale, Arizona, comparten algunas sugerencias de qué hacer y qué no hacer tratándose de apoyar a alguien con su situación de infertilidad.
Lo que No debes hacer y decir
1. Aléjate de dar consejos que no te han solicitado.
Excepto los que pidan, no des consejos ni un esquema de pasos a seguir.
“Lo más probable es que quien sea que esté pasando por esto ya haya intentado todo lo posible – todo lo que están dispuestos a tratar – así es que no son útiles los consejos que no te han solicitado, a pesar de que sean bien intencionados”, señaló Jenny. “A nosotros nos sucedió que hubo quienes actuaban como si no supiéramos qué hacer para tener bebés porque había sido tan fácil para ellos”, dijo.
Por ejemplo, evita comentarios y preguntas como los siguientes:
- ¿Por qué no adoptan?” Adopción podría ser una opción, pero no es un proceso sencillo ni está disponible para todos. Tampoco le resta al dolor que están atravesando en estos momentos.
- “¿Han considerado la fertilización in vitro?” Muchos seguros no cubren la fertilización in vitro (FIV o IVF, por sus siglas en inglés), así es que esto puede suponer un costo prohibitivo para algunos. Y la FIV tampoco ofrece una garantía al 100% de que se logre tener un bebé.
- “¿Será que haciendo/no haciendo esto o lo otro, mejoren sus probabilidades?” No uses la culpa como un posible motivo por haber perdido a un bebé o no poder embarazarse. El embarazo no funciona de esa manera. Es muy poco probable que cualquier cosa que hayan hecho les haya ocasionado sus problemas de fertilidad.
2. No preguntes sobre la causa o causas del aborto espontáneo o el motivo de su infertilidad.
“Cuestionar las razones podría detonar emociones negativas como la culpabilidad y restar al tono de apoyo y empatía”, dijo el doctor Dannaram. “La causa de la infertilidad podría ser demasiado personal (en ocasiones, involucrando a la pareja) y no establece un tono empático”, agregó.
3. No finjas que no sucedió.
La pérdida de un embarazo y la infertilidad no son conversaciones fáciles de tener, lo cual podría hacer que evites esos temas por completo. Sin embargo, ignorar lo que es tan evidente puede ocasionar que algunas personas sientan que eres insensible o no brindas tu apoyo.
4. Evita preguntarles si ya están embarazados.
Puede ser que tengas la curiosidad, pero – a decir verdad – no es asunto tuyo. Embarazarse y no perder el embarazo son temas que ya tienen muy presentes, así es que no necesitan que se los recuerden continuamente. Lo compartirán cuando estén listos para hacerlo, si es que ocurre y cuando ocurra.
5. Deja de hablar a nombre del universo.
No, ese aborto espontáneo o la infertilidad no forman parte de un plan divino ni es como se supone que debería ser. Los comentarios de este tipo no ayudan y sí lastiman. Implican que esa persona no sólo es infértil, sino que no merece serlo o está recibiendo un castigo por algún motivo.
Lo que debes hacer y decir en vez
1. Sigue su pauta.
Algunas amistades podrían ser muy abiertas acerca de su experiencia, tanto en público como en las redes sociales, mientras que otras, prefieran guardar silencio y manejarlas dentro de su núcleo familiar cercano.
“Es importante saber lo que está bien y lo que no está bien para esa pareja en particular”, dijo la doctora Shah. “Algunas parejas no tienen ningún problema con tratar el tema; han asimilado la información y se sienten cómodas. En tanto que, otras, podrían seguir luchando emocionalmente para aceptar su pérdida. Podrían requerir de más tiempo para estar en una mejor situación y poder hablar de ello”, explicó.
2. Escucha y demuéstrales que te importan.
La infertilidad y la pérdida de un embarazo pueden provocar una fuerte sensación de aislamiento. Algunas personas podrían retraerse. Otras podrían desear conversar acerca de ello. Déjales saber que estás ahí para ellas y lo que les sucede es importante para ti. Si se deciden a hablar, limítate a escuchar – no escarbes ni les des un discurso motivacional. Permíteles externar sus sentimientos y sentir lo que tengan que sentir.
“En el caso de la infertilidad, estaba totalmente fuera de nuestro control, así es que le agradecimos a la familia y a los amigos que nos dejaran compartir nuestra realidad, que nos escucharan y que solamente nos dijeran: ‘Sé que esto ha de ser difícil. Te quiero y estoy aquí contigo’.”, externó Jenny.
3. Proporciona una fuente de normalidad o distracción.
“Con frecuencia, cuando las mujeres atraviesan por los tratamientos para promover la fertilidad, eso se convierte en lo que están haciendo casi a todas horas y en quienes son en el momento”, explicó la doctora Shah. “No quieren que se les hagan preguntas. Quieren ir al trabajo, salir cenar con sus amigos y no pensar en lo que es su obsesión cuando están en casa”, afirmó.
Lleva a tu amiga al cine, a que le hagan una pedicura o simplemente a tomar un café. Pero hay que ser compresivos si esa persona rechaza la invitación. Podría no estar lista para ello.
4. Investiga por tu cuenta.
Guárdate tus preguntas entrometidas para Google. Lee sobre la infertilidad y la pérdida de un embarazo para que tengas una mejor comprensión de lo que les está sucediendo. La Asociación Estadounidense de Psicología [(APA, por sus siglas en inglés) (en inglés)] y la National Infertility Association (en inglés) son buenos puntos de partida.
5. Ten paciencia y respeta su privacidad.
El trayecto de cada persona (y de cada pareja) a través de la infertilidad y la pérdida de un embarazo es diferente y único. Ten paciencia y comprensión, y permanece presente para apoyarlas.
De igual manera, respeta su privacidad. Si tu amistad o ser querido te confía los retos que está enfrentando, no difundas la información a los demás, incluso entre los miembros de la familia.
“Cuando las personas comparten esas experiencias, lo están haciendo con sus amistades cercanas, en busca de reafirmación y apoyo, con base en la calidad de la relación que tienen”, dijo el doctor Dannaram. “Salvo que te hayan pedido que se lo comuniques a alguien más, mantener la confidencialidad es la forma de brindar el apoyo que les permitirá recuperarse del duelo y del estrés”, indicó.
Unas palabras para concluir
Estar presente para esa amistad en estos momentos es algo que apreciará más de lo que te puedas imaginar. Ya sea que tenga dificultades para embarazarse o para no perder el embarazo, estar ahí con el corazón y los oídos abiertos fortalecerá su relación y le ayudará a esa persona a navegar a través de este arduo trayecto.
“Nos tomó algunos años para atravesar y procesar las etapas del duelo, pero hoy, nos sentimos muy bien”, dijo Jenny. “Tuvimos tanto amor y apoyo a nuestro alrededor ayudándonos a salir adelante. Nosotros mismos no tenemos hijos, pero tenemos en nuestras vidas a un sobrino y una sobrina, además de los hijos de nuestros amigos a quienes consentimos. Y esto, sin dejar de lado a tres perros adorables que nos mantienen ocupados. Estamos en un buen lugar y satisfechos hoy en día”, finalizó.