De niño, es posible que no hayas recibido el cuidado, el apoyo y la comprensión que necesitabas de tus padres. Quizás hayas enfrentado desafíos que te dejaron una huella emocional duradera.
La reparentalización es una manera de nutrirte, apoyarte y cuidarte como adulto de maneras que quizás no hayas experimentado cuando eras niño.
“La reparentalización es cuando un adulto se esfuerza por satisfacer sus propias necesidades emocionales o físicas que no fueron satisfechas en su infancia. Estas necesidades pueden incluir afecto, seguridad, rutinas y estructura, regulación emocional y compasión”, afirmó Jerimya Fox, consejera profesional con licencia y doctor en salud conductual de Banner Health.
La reparentalización se inspira en la teoría del apego y en la comprensión de que las experiencias tempranas de la vida tienen un fuerte impacto en el bienestar emocional. Te lleva a la raíz de tu dolor emocional para que puedas sanar las heridas que pudieron haber comenzado en tu infancia. La reparentalización puede tener un gran impacto en la sanación. Enfatiza la necesidad de revisar y replantear tu relación contigo mismo, fomentando el amor propio y la aceptación.
La reparentalización es una técnica que se puede aprender y practicar en terapia, pero se centra en el autocuidado. Implica centrar las actividades y los pensamientos de forma que promuevan el bienestar emocional y la autocompasión. En el proceso de reparentalización, se aprende a identificar y responder a las propias necesidades emocionales, lo que puede brindar una sensación de empoderamiento y resiliencia.
La experiencia de reparentalización de cada persona es única y personal, moldeada por su historia y sus desafíos. No existe un enfoque universal. Los terapeutas trabajan en estrecha colaboración con las personas para adaptar el proceso a sus necesidades y objetivos.
La recrianza puede cambiar tu forma de relacionarte contigo mismo y con el mundo. Podrías descubrir nuevas fortalezas, resiliencia y una mayor autocompasión que se extenderá a lo largo de tu vida.
Señales de que la reparentalización podría ser útil
“Es posible que tus padres no hayan cubierto todas tus necesidades. Por eso, quizás debas aprender a darte lo que te faltó de niño para mejorar tu salud mental general hoy”, dijo el Dr. Fox.
Si está considerando reeducar a su hijo, debería empezar por pensar en sus experiencias personales, especialmente las de la infancia. Los recuerdos que le provocan angustia emocional o que siguen influyendo en el presente podrían ser señales de que la reeducación podría ser útil.
Quizás notes patrones de autodescuido o diálogo interno negativo. Si te das cuenta de que minimizas tus logros, dudas de tu valía o participas en comportamientos que sabotean tu futuro, es posible que tengas heridas emocionales sin resolver que podrían sanar con la reparentalización.
Si te cuesta afrontar los desafíos de la vida sin criticarte, o no puedes brindarte la misma amabilidad que brindas a los demás, la recrianza podría ayudarte a abordar tu necesidad de apoyo emocional. Puede brindarte un marco para una relación más enriquecedora contigo mismo.
Cómo funciona el proceso de reparentalización
El proceso de reparentalización comienza con una relación de confianza con un terapeuta. Necesitas una base sólida para compartir tus emociones, pensamientos y experiencias más profundas. Te conviene trabajar con un terapeuta que cree un espacio seguro donde puedas hablar abiertamente sobre tus vulnerabilidades.
Existen formas de reparentalización en las que el terapeuta asume el rol del padre o la madre y guía a la persona hacia la sanación, pero la autoreparentalización es el tipo de reparentalización más utilizado hoy en día. "Es cuando la persona, en lugar del terapeuta, se reparentaliza a sí misma", explicó el Dr. Fox.
Un terapeuta te guía en este camino con perspectivas y te ayuda a desarrollar las habilidades necesarias para la autocompasión y el cambio. Puede brindarte un espacio de apoyo para explorar tus emociones, afrontar heridas del pasado y comprender los patrones de comportamiento que comenzaron en tus primeros años. Si bien trabajarás con un terapeuta, el verdadero poder de la reparentalidad nace de ti.
Un terapeuta puede ayudarte a explorar los patrones dañinos que aprendiste durante tu infancia. A través de la autoeducación, aprendes a reconocer y cambiar el diálogo interno dañino que aprendiste de tus padres y a reemplazarlo por uno más saludable, dijo el Dr. Fox.
Trabajarás con tu terapeuta para explorar heridas y experiencias pasadas. Tu terapeuta podría sugerir conversaciones guiadas, ejercicios terapéuticos y trabajo reflexivo. La clave no es detenerse en el dolor, sino comprenderlo para promover la sanación.
Una parte clave de la reparentalización es desarrollar técnicas para tranquilizarse y afrontar la situación. Su terapeuta trabajará con usted para encontrar estrategias que pueda usar para cuidarse. Esto podría incluir prácticas de atención plena, ejercicios de conexión a tierra o salidas creativas.
Al recriar, también aprendes a tratarte con la misma amabilidad, comprensión y paciencia que usarías con un amigo cercano. Tu terapeuta puede ayudarte a desafiar los pensamientos críticos y a desarrollar una mentalidad de autoaceptación.
La reparentalización también incluye centrarse en el cuidado personal, como el descanso, la alimentación y las actividades que le brindan alegría y satisfacción.
Cómo la reparentalización puede ser parte de tu vida diaria
A medida que avance en su proceso de recrianza, querrá incorporar prácticas de crianza a su vida diaria. Estas podrían ser:
- Los rituales matutinos , como los ejercicios de atención plena, las afirmaciones positivas o dedicar tiempo a la gratitud, pueden marcar una pauta positiva para el día.
- Descansos de autocuidado durante el día para actividades como una caminata corta, ejercicios de respiración profunda o disfrutar unos minutos de tu pasatiempo favorito. Estos descansos te dan la oportunidad de reconectar contigo mismo.
- Establecer límites , lo que puede implicar decir no cuando sea necesario, anteponer tu bienestar y crear espacio para cosas que te aporten alegría y relajación.
- Llevar un diario te permite reflexionar sobre tus emociones, experiencias y momentos de autodescubrimiento. Escribir puede ayudarte a procesar tus pensamientos y a desarrollar tu autoconciencia.
Construir una red de apoyo de amigos y familiares
Querrá compartir su experiencia de recrianza con familiares y amigos cercanos. Informe a sus seres queridos más cercanos sobre la recrianza y cómo le está ayudando. Con una comunicación abierta, sus seres queridos pueden brindarle comprensión, apoyo y ánimo. Las conexiones sólidas con los demás pueden fortalecer su sentido de seguridad y pertenencia.
Superando desafíos
Es posible que enfrentes desafíos durante la reparentalización. Aquí tienes algunos que podrían surgir:
- Quizás no crea que el proceso funcionará: le conviene hablar honestamente con su terapeuta sobre estas inquietudes. Su terapeuta puede ayudarle a comprender los beneficios de la reparentalización y a establecer metas realistas.
- Quizás no quieras revivir experiencias pasadas que puedan ser emocionalmente intensas: tu terapeuta puede ayudarte a crear un plan para cuando las emociones se vuelvan abrumadoras. También puede asegurarte que la liberación emocional es una parte natural y esencial de la sanación.
- Es posible que usted sea una persona complaciente sin comprender mucho sus propias necesidades, por lo que es posible que necesite aprender a establecer límites.
Necesitarás ser paciente y perseverante en el proceso de sanación. No es un proceso lineal. Tendrás altibajos, y el progreso puede darse en pequeños pasos.
Puede ser útil reconocer el esfuerzo que has puesto en el proceso y celebrar las pequeñas victorias con caprichos como tu comida favorita, un baño relajante o una actividad de ocio que te guste.
El resultado final
La reparentalización es un proceso en el que aprendes a darte el amor, la aceptación, el apoyo y la comprensión que quizás no recibiste de tus padres cuando eras niño.
“Autocriar a los hijos requiere mucha energía y esfuerzo”, dijo la Dra. Fox. “Pero los beneficios incluyen procesar las emociones, establecer límites firmes, verse a uno mismo de forma más positiva y crear relaciones más sanas”.
Si desea obtener más orientación sobre cómo reeducar a los niños y sanar las heridas de la infancia, comuníquese con un experto de Banner Health o llame a Banner Behavioral Health al 602-254-4357.