A menudo denominada "terapia de conversación", la psicoterapia puede ser muy útil cuando se trata de superar una variedad de problemas o cambios que las personas enfrentan a lo largo de su vida. Nuestro equipo de expertos en terapia se dedica a abordar el tratamiento de psicoterapia como un esfuerzo de colaboración para que pueda aprovechar al máximo cada sesión.
La psicoterapia implica la comunicación entre un paciente y su terapeuta para ayudar con una variedad de problemas, que incluyen:
El objetivo de la psicoterapia es eliminar o controlar los síntomas preocupantes que experimentan las personas y aumentar el bienestar general. Por lo general, este tipo de terapia comienza con una evaluación, que se enfoca en los antecedentes del paciente y qué problema lo llevó a buscar ayuda. Posteriormente, el doctor y el paciente acordarán una estrategia de tratamiento, un procedimiento y un programa de sesiones. Las necesidades de cada persona varían y cada tratamiento se adapta a las preocupaciones, la personalidad y las circunstancias de la vida del paciente.
La psicoterapia y la psiquiatría a menudo se confunden porque son profesiones superpuestas. Si bien ambas son terapias de salud mental, la psicoterapia involucra a un terapeuta y no a un psiquiatra. Un psiquiatra es alguien que se especializa en la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de enfermedades mentales. Un psiquiatra suele recetar medicamentos y ayuda a los pacientes a controlarlos. Un psicólogo es alguien que puede evaluar y tratar trastornos mentales y emocionales, realizar pruebas psicológicas y brindar psicoterapia.
El tipo de psicoterapia que recibe un paciente depende de sus circunstancias y preferencias únicas. En algunos casos, se combinan elementos de diferentes tipos de terapias para satisfacer mejor las necesidades del paciente. Hay varios tipos diferentes de psicoterapia, que incluyen:
La terapia cognitiva conductual se enfoca en identificar y cambiar patrones de pensamiento y comportamiento que son ineficaces o dañinos. La TCC se enfoca en los problemas actuales del paciente y explora cómo resolverlos mediante la aplicación de comportamientos funcionales y pensamientos más precisos. Este tipo de terapia puede ser útil en el tratamiento de una variedad de trastornos, como:
La terapia conductual dialéctica es un tipo de terapia cognitiva conductual que ayuda a regular las emociones del paciente. La terapia conductual dialéctica se enfoca en enseñar nuevas habilidades para ayudar a los pacientes a asumir la responsabilidad y cambiar los comportamientos nocivos o perjudiciales.
Este tipo de terapia a menudo se usa para tratar:
La terapia conductual dialéctica generalmente involucra tanto terapia grupal como individual.
La terapia interpersonal es una forma de tratamiento a corto plazo que ayuda a los pacientes a comprender los problemas subyacentes interpersonales problemáticos. Estos problemas pueden incluir cambios en los roles sociales o laborales, conflictos con otros o duelo no resuelto. El objetivo de IPT es ayudar a los pacientes a mejorar sus habilidades de comunicación con los demás y aprender formas saludables de expresar sus emociones. La IPT se usa con mayor frecuencia para tratar la depresión .
La terapia centrada en la familia (FFT) está diseñada para ayudar a las personas con trastorno bipolar . FFT implica una combinación de dos enfoques de terapia: psicoeducación y terapia familiar. Esta terapia trata a toda la familia de la persona con trastorno bipolar, ya que puede tener un gran impacto en toda la familia.
El objetivo de FFT es establecer relaciones familiares más saludables, mejorar la conexión y mejorar la comunicación. Estas mejoras pueden ayudar a los miembros de la familia a convertirse en un mejor sistema de apoyo emocional entre sí y ayudar a la persona con trastorno bipolar a controlar su trastorno y su bienestar general.
La psicoterapia ayuda a las personas con una amplia gama de problemas, como baja autoestima, adicción, depresión o disputas familiares. Cualquiera que sea incapaz de hacer frente a sus problemas o se sienta abrumado por ellos puede beneficiarse de la psicoterapia.
Durante su primera sesión, su terapeuta recopilará información sobre usted y sus necesidades. Es posible que le hagan preguntas o que llene un formulario con información sobre su salud física y emocional actual y pasada. Tenga en cuenta que usted y su terapeuta pueden tardar algunas sesiones en determinar el mejor curso de tratamiento en función de sus necesidades únicas.
La primera sesión con un terapeuta también es una oportunidad para que los pacientes conozcan a su terapeuta y se aseguren de que sea una buena combinación. Para que la psicoterapia funcione, una buena relación con su terapeuta es fundamental. Haga preguntas durante su cita y, si no se siente cómodo, pruebe con otra persona.
Una vez que se haya decidido por un terapeuta y un plan de tratamiento, es probable que se reúna en el consultorio de su terapeuta o en línea para una sesión que dura entre 45 y 60 minutos. La frecuencia de sus sesiones dependerá de su plan de tratamiento y sus necesidades, pero generalmente se realizan una vez a la semana o cada dos semanas. Dependiendo de su situación, el tratamiento de psicoterapia puede durar tan solo unas pocas semanas para situaciones a corto plazo o, en el caso de una enfermedad mental o preocupaciones a largo plazo, un año o más.
En la mayoría de los casos, la psicoterapia se puede proporcionar en un centro ambulatorio . Si ha sido admitido para recibir tratamiento, la psicoterapia puede llevarse a cabo en un hospital. Estas sesiones generalmente ocurren en un entorno grupal y se enfocan en la seguridad y la estabilización.
Independientemente de lo que enfrente, los expertos de Banner Health están aquí para diagnosticar, tratar y ayudarlo a sentirse como usted mismo nuevamente.
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