La lesión de los tejidos blandos es el tipo de lesión más común que se sufre al practicar deportes, actividad física o ejercicio.
Una lesión de tejidos blandos es cualquier lesión que causa daño a la piel, ligamento o tendón. Estas lesiones se clasifican como cualquier traumatismo causado por una fuerza externa o por uso excesivo de la actividad física que provoca una lesión. Por ejemplo, los corredores de larga distancia ejercen una gran presión sobre sus piernas y pies. El resultado a menudo puede ser un traumatismo o distensiones en áreas clave de la parte inferior de la pierna, como los músculos de la pantorrilla o el tendón de Aquiles.
Existen varios tipos de lesiones de tejidos blandos, que comúnmente incluyen:
El síntoma principal de cualquier lesión de tejido blando será el dolor en la parte lesionada del cuerpo, pero el dolor puede comenzar siendo algo leve y, a menudo, puede empeorar durante las primeras 48 horas después de la lesión. Otros síntomas de lesiones de tejidos blandos pueden incluir:
El tratamiento inmediato debe comenzar con el método RICE (descanso, hielo, compresión y elevación). Casi todas las lesiones de tejidos blandos causarán algún grado de hinchazón. Los medicamentos de venta libre pueden ayudar con el dolor y la hinchazón.
Para una lesión de tejido blando más grave, se recomienda una evaluación inmediata por parte de un proveedor de medicina deportiva.
Las lesiones graves de tejidos blandos pueden requerir procedimientos quirúrgicos para reparar el daño.
Muchas de estas cirugías se pueden realizar mediante artroscopia, es decir, un procedimiento mínimamente invasivo en el que se realizan pequeñas incisiones para reparar el daño. En la mayoría de los casos, estos procedimientos son bastante rápidos y no requieren pasar la noche en el hospital.
Las personas a menudo se sorprenden por la cantidad de tiempo necesaria para que se recupere una lesión de tejido blando y se preguntan por qué no vuelve a la normalidad en unas pocas semanas. Desafortunadamente, el cuerpo puede necesitar mucho más tiempo para recuperarse por completo. Su proveedor de medicina deportiva hablará con usted sobre el tiempo de recuperación y evaluará su progreso a lo largo de su recuperación. Nuestro objetivo es que vuelvas al juego lo antes posible de forma segura.
Los mejores métodos para prevenir lesiones de tejidos blandos incluyen el acondicionamiento, el entrenamiento y el uso del equipo adecuado. Otras medidas de prevención incluyen:
Desarrollar un programa de acondicionamiento físico que combine ejercicio cardiovascular con entrenamiento de fuerza y flexibilidad. Trate de no abusar de un área del cuerpo y trabaje para incorporar también ejercicios de cuerpo completo.
Comience a estirar lenta y cuidadosamente. Estire diferentes áreas del cuerpo, no solo las que se utilizan en un ejercicio en particular. Muchas veces el estiramiento puede incluir ejercicios ligeros como caminar o trotar.
Saltar directamente a una actividad extenuante sin realizar lentamente movimientos de alta intensidad a menudo puede provocar lesiones. Recuerde siempre calentar antes de pasar a un ejercicio más intenso y finalizar cualquier actividad intensa con una disminución lenta, en lugar de detenerla abruptamente.
La fatiga general y la fatiga muscular suelen ser causa de lesiones. Duerma lo suficiente y no se exceda en ejercicio y movimiento. También es fundamental beber suficiente agua para evitar la deshidratación y el agotamiento. Las investigaciones muestran que los atletas deberían beber al menos la mitad de su peso corporal en onzas por día. Por ejemplo, un atleta que pesa 160 libras debería beber 80 onzas de agua por día.
Si sufre algún tipo de lesión en los tejidos blandos, los proveedores expertos en medicina deportiva de Banner Health pueden ayudarlo a recuperarse de manera rápida y segura.
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