El rotavirus es un virus altamente contagioso que afecta principalmente a bebés y niños pequeños. Infecta el tracto digestivo (gastrointestinal), inflama (hincha) las células que recubren el intestino delgado e interrumpe la digestión.
Puede causar diarrea intensa, vómitos, fiebre y dolor abdominal. La pérdida de líquidos y electrolitos puede provocar deshidratación. Las infecciones por rotavirus son comunes en todo el mundo y son una de las principales causas de hospitalización por diarrea en niños menores de 5 años.
El rotavirus se propaga fácilmente cuando las partículas de las heces de una persona infectada entran en contacto con la boca de otra persona (vía fecal-oral). Esto puede ocurrir con:
El virus se propaga fácilmente en lugares como guarderías, hogares con niños pequeños y condiciones de vida en condiciones de hacinamiento. Puede ser contagioso desde dos días antes de que aparezcan los síntomas hasta 10 días después y puede permanecer en superficies durante semanas o meses. Las infecciones son más comunes en invierno y primavera.
En el caso del rotavirus, es posible que notes que tu bebé o niño tiene:
Los síntomas suelen aparecer entre uno y tres días después de la exposición al virus. La diarrea y los vómitos pueden durar entre tres y siete días, por lo que existe un alto riesgo de deshidratación. La mayoría de los niños mejoran en una semana, pero a veces los síntomas duran más.
Las infecciones son posibles, pero menos frecuentes, en niños mayores y adultos. Las personas con sistemas inmunitarios más débiles corren mayor riesgo.
Debe consultar a un médico si su hijo presenta síntomas de rotavirus. Es especialmente importante buscar atención médica en los siguientes casos:
Para diagnosticar el rotavirus, el médico comprobará los síntomas y los antecedentes médicos de su hijo. Buscará signos de deshidratación y preguntará si el niño ha estado expuesto al virus. Es posible que le realice un análisis de heces para confirmar que el rotavirus (y no otra enfermedad) es la causa de los síntomas.
Otras afecciones con síntomas similares al rotavirus incluyen:
No existe ningún medicamento que su hijo pueda tomar para curar una infección por rotavirus. Estas medidas pueden ayudar a controlar los síntomas en casa y prevenir la deshidratación:
Es posible contraer rotavirus más de una vez, pero suele ser más leve después de la primera vez.
La mejor manera de prevenir la infección por rotavirus es mediante la vacunación. La vacuna contra el rotavirus (RotaTeq o Rotarix) se administra en una serie de dosis orales (gotas por la boca) que comienzan a los 2 meses de edad.
La vacuna contra el rotavirus es segura y eficaz. Algunos bebés presentan diarrea leve o vómitos después de la administración, que desaparecen rápidamente. La vacuna no se recomienda para niños que han tenido una afección llamada invaginación intestinal, en la que el intestino se pliega hacia atrás sobre sí mismo. Tampoco se debe administrar a niños que tienen el sistema inmunitario muy debilitado. Esto es muy poco frecuente y su médico puede ayudarle a decidirlo.
Las infecciones por rotavirus solían ser más comunes, pero las vacunas están ayudando a los niños pequeños a mantenerse sanos. Los niños que están vacunados tienen menos probabilidades de enfermo por rotavirus. Si lo hacen, tienen menos probabilidades de sufrir una infección grave.
Estas medidas también pueden ayudar a prevenir la propagación del rotavirus:
El rotavirus es un virus muy contagioso que suele afectar a bebés y niños pequeños y provoca diarrea, vómitos, fiebre y dolor abdominal. Puede provocar deshidratación. La infección se propaga fácilmente a través de las manos sin lavar, las superficies, los alimentos y el agua, pero la vacunación puede ayudar a prevenir la infección.
Si su hijo muestra síntomas de rotavirus o si le preocupa la deshidratación, consulte con un proveedor de atención médica.
En Banner Health, nuestros pediatras y proveedores de atención médica experimentados están bien versados en el diagnóstico y el tratamiento de las infecciones por rotavirus. Nos comprometemos a mantenernos actualizados con las últimas pautas e investigaciones médicas y adaptamos el tratamiento a las necesidades de cada persona. Nos aseguraremos de que su hijo reciba la mejor atención posible.